Cueva lo que hiciste esta ves no tiene nombre
En un acto que muchos ya califican como una infamia sin precedentes, el futbolista Christian Cueva se ha convertido en el villano de su propia historia familiar. La denuncia de su aún esposa, la empresaria Pamela López, ha sacudido al país entero: ¡el jugador habría vendido el departamento que estaba destinado como herencia para su hija mayor! Una decisión que, según López, no solo traiciona un pacto familiar, sino que deja al descubierto la peor faceta del mediocampista: un padre que “vendió el futuro de su propia sangre”.
Todo comenzó cuando López reveló públicamente que Cueva realizó la venta del inmueble sin su consentimiento, y lo hizo a un precio de risa: apenas 40 mil dólares, cuando su valor real superaba los 130 mil. Peor aún, la propiedad había sido comprada en 2017 a los padres de la empresaria, quienes la vendieron a precio de costo como un gesto de cariño hacia la pareja y su pequeña hija, nacida en 2014. “Ese bien era para mi hija, fue comprado pensando en su futuro”, declaró entre lágrimas López en una explosiva entrevista.
El departamento, de 134 metros cuadrados y ubicado en una de las zonas más codiciadas de Trujillo, fue transferido solo a nombre de Cueva, pese a que la familia de Pamela aportó gran parte del dinero. Hoy, esa misma propiedad ha desaparecido de sus manos, vendida por una suma que —según expertos inmobiliarios— no cubre ni el valor del terreno.
“Una operación sospechosa y cruel”
El caso explotó mediáticamente cuando la siempre polémica Magaly Medina destapó los documentos de la transacción en su programa “Magaly TV La Firme”. “Esto huele muy mal”, sentenció la periodista, al mostrar que la venta se efectuó por debajo del 30 % de su valor real. “Es incomprensible cómo un padre puede desprenderse de un bien destinado a su hija. Es una traición a su propia familia”, agregó con indignación.
La teoría de Pamela López es aún más escandalosa: sostiene que Cueva habría vendido el inmueble para ocultar bienes antes del divorcio, evitando así que parte de su patrimonio sea considerado en la división legal. “Él sabía lo que hacía. No solo me engañó como mujer, sino que jugó con el futuro de nuestros hijos”, denunció con firmeza.
Amenazas, miedo y lágrimas en Trujillo
Como si fuera poco, López reveló un episodio digno de una película de terror. Cuatro sujetos en un auto oscuro llegaron a la casa de sus padres en Trujillo, se identificaron como “los nuevos dueños del departamento” y exigieron la entrega inmediata del inmueble. “Mis padres estaban aterrados, temblaban. Imagínate, ver a extraños decirte que tu casa ya no te pertenece”, contó la empresaria entre sollozos.
Las acusaciones no se detienen ahí. Pamela responsabilizó directamente a Cueva por las amenazas sufridas por su familia, llamándolo sin piedad: “mala persona, mal agradecido, sinvergüenza, mal padre, infiel, manipulador, cobarde, agresor y lacra”.
Además, recordó que el futbolista le debe 80 mil dólares a su familia —un préstamo que nunca fue devuelto— y lo acusó de incumplir con la pensión alimenticia de sus hijos. “Él puede tener dinero para autos, relojes y fiestas, pero no para sus hijos”, arremetió con furia.
Silencio culpable y repudio generalizado
Mientras tanto, Christian Cueva guarda un silencio ensordecedor. No ha emitido ninguna declaración pública, ni ha mostrado arrepentimiento. Su mutismo solo ha incrementado la ola de críticas que lo tildan de “padre desalmado” y “traidor familiar”.
Las redes sociales arden: cientos de usuarios exigen que el jugador responda, mientras otros piden que las autoridades intervengan para proteger los derechos de los menores. “No se trata solo de dinero, se trata de dignidad, de humanidad”, escribió un usuario indignado.
El caso Cueva-López ha pasado de ser un conflicto conyugal a un escándalo nacional que revela el lado más oscuro del ídolo deportivo. Detrás de los reflectores, de los goles y las cámaras, emerge la imagen de un hombre que —según las denuncias— fue capaz de traicionar a su propia sangre por dinero. Una historia de amor rota, ambición y poder que ha dejado a toda una familia en ruinas… y a un país entero en shock.