Asi la munda Mayra Couto recapacito y destruyo a Tatiana Astengo
La actriz Mayra Couto, recordada por muchos como una figura asociada a causas progresistas y feministas, sorprendió a todo el país con una respuesta firme, mesurada y profundamente crítica hacia Tatiana Astengo, luego de que esta última protagonizara un escándalo monumental por sus expresiones ofensivas contra efectivos de la Policía Nacional del Perú durante una reciente manifestación. Lo que pocos esperaban era que Couto —una voz usualmente cercana a discursos de izquierda— se convirtiera en la primera en marcar distancia y condenar con claridad el acto de violencia verbal cometido por su excompañera de gremio.
En una declaración que remeció las redes y medios de comunicación, Mayra Couto calificó las palabras de Astengo como “violencia verbal” y pidió a la ciudadanía reflexionar sobre la diferencia entre la crítica legítima y el ataque gratuito.
“Tatiana, me parece súper desafortunado, como les estaba contando a los chicos. Me parece que es violencia verbal, pero también me parece que una cosa es disparar palabras y otra cosa es disparar balas. Y ahí tenemos que, como público en general, hacer la diferencia y ser muy críticos con eso.”
Sus declaraciones no se quedaron ahí. Con serenidad pero sin ambigüedades, Couto dejó claro que, pese a su simpatía personal hacia Tatiana, no hay excusa posible para un discurso cargado de odio.
“Es algo muy desafortunado y no lo justifico, por más que Tatiana me cae súper bien. No tengo nada personal con ella, quiero decir, pero me parece muy desafortunado. (…) Igual es violencia, no lo voy a justificar. Pero hay violencias y violencias también. Lamentablemente, en este país sobra.”
Las palabras de Mayra generaron una auténtica revolución mediática. En cuestión de horas, su nombre se volvió tendencia en plataformas digitales y fue elogiada incluso por sectores que antes la criticaban. Para algunos analistas, lo que hizo Couto fue una muestra de madurez y coherencia: reconoció su postura progresista, pero no cayó en el silencio cómplice ni en la defensa ideológica. Por el contrario, fue una de las pocas voces del mundo artístico en reconocer que los excesos verbales también constituyen una forma de agresión.
El caso de Tatiana Astengo, por su parte, ha sido motivo de indignación nacional. Durante la protesta del pasado 15 de octubre, la actriz lanzó una frase que dejó sin palabras incluso a quienes solían apoyarla:
“Solo quieres plata, grábame y este recuerdo te lo voy a dejar para tu hija que la van a violar este Gobierno de violadores.”
Una expresión que no solo generó rechazo social, sino que también podría tener consecuencias legales.
Diversos sectores exigieron que el Ministerio Público investigue el caso y que las autoridades respondan sin sesgos ideológicos. La violencia —señalan— no puede justificarse ni de un lado ni del otro. En ese contexto, las palabras de Mayra Couto se alzan como una especie de castigo moral y simbólico: un recordatorio de que el respeto y la empatía deben prevalecer, incluso en el calor de una protesta.
— sin mermeladas (@sinMermeladaspe) October 24, 2025
Así, la otrora actriz “progre” dio una verdadera lección de sensatez y coherencia. Con una respuesta firme, logró lo que muchos políticos, activistas y figuras del espectáculo no se atreven a hacer: condenar la violencia venga de donde venga. Su intervención no solo marcó un antes y un después en el debate público, sino que evidenció que la madurez no tiene ideología, y que, cuando se trata de defender la dignidad y el orden, incluso quienes fueron íconos de lo “alternativo” pueden ser los más contundentes defensores del respeto y la justicia.
