Es capaz de todo por salir de la cana y asi lo demostro
Cuando la desesperación se apodera de un hombre encerrado entre rejas, no existen límites. Y si algo ha dejado claro Andrés Hurtado, el controversial expresentador de televisión conocido como «Chibolín», es que no está dispuesto a pudrirse tras las rejas sin pelear hasta su última carta. ¡Y vaya que lo está haciendo a lo grande! En una movida digna de una serie de crimen y traición, Hurtado ha sido capaz de sacrificar a una jueza corrupta, Paola Valdivia, para intentar recuperar su ansiada libertad.
Una explosiva investigación de la Autoridad Nacional de Control (ANC) ha destapado el escándalo que ya remeció los cimientos del Poder Judicial: la jueza anticorrupción Paola Valdivia recibió, sin asomo de vergüenza, regalos de parte de Hurtado y su entorno más cercano. Entre lámparas, muebles y remodelaciones enteras, Valdivia terminó atada de pies y manos a los favores del expresentador, en una relación turbia que ahora podría costarle su carrera, su libertad… ¡y hasta su dignidad!
El caso explotó cuando ‘El Chamo’, asistente personal de Hurtado, reveló en un desaparecido programa de televisión que él mismo remodeló el departamento de la jueza ubicado en Pueblo Libre. La inspección posterior confirmó que las imágenes proporcionadas por ‘El Chamo’ coincidían exactamente con la lujosa decoración del inmueble: desde la sala hasta el dormitorio del hijo de la magistrada. ¡Un lujo que, claro está, no supo explicar ni justificar!
La defensa de Valdivia intentó desesperadamente salvarla del naufragio, mostrando recibos de compra que resultaron ser ¡un fraude!, con fechas alteradas y montajes burdos. Más aún: la jueza, que primero dijo haber comprado el departamento con préstamos, terminó desenmascarada cuando se probó que pagó todo al contado, desnudando así un enriquecimiento oscuro que no pudo justificar.
Andrés Hurtado, en su estrategia de supervivencia, no dudó en hundirla públicamente. Aseguró que todo fue «una ayuda de corazón» motivada por su amistad con el difunto esposo de la jueza, un policía apodado ‘El Cabezón’. Pero más allá del tono melodramático de su versión, lo cierto es que su testimonio fue la daga final que atravesó la ya tambaleante carrera de Valdivia.
“En algún momento (…) Espíritu Colchado le dijo de forma muy circunstancial (a ‘El Chamo’): ‘Juégate algo para mi depa’, y entonces él tenía unas lámparas de araña. Y le mandó al ‘Cabezón’ una o dos lámparas y le dijo fíjate en el depósito de canjes donde hay tantos regalos que tiene en cada semana, porque ‘El Cabezón’ estaba malito de salud y es por eso que lo hice”, declaro Andres Hurtado
El informe demoledor de la ANC no se detuvo allí: reveló que Paola Valdivia favoreció al infame exalcalde de San Juan de Lurigancho, Carlos Burgos, en uno de los procesos de corrupción más sonados. Prescribió una acción penal clave y redujo descaradamente la reparación civil a favor del Estado, asegurando impunidad y beneficios para quienes alguna vez manejaron millonarias arcas públicas.
Y aunque Valdivia no fue juez directa del caso del cómico Alfredo Benavides, su cercanía a figuras como Burgos —quien estaría implicado en el presunto uso de testaferros— levanta aún más sospechas sobre su papel en el lodazal judicial que hoy, por fin, comienza a salir a la luz.
Así, mientras la magistrada enfrenta suspensión y un proceso disciplinario que podría acabar en su destitución e incluso en prisión, Andrés Hurtado demuestra que en su lucha por recobrar la libertad no hay amigos, no hay aliados, no hay códigos: hay solo un objetivo claro, y está dispuesto a arrasar con quien sea necesario para conseguirlo.
¡El show más grotesco de corrupción, traiciones y caídas apenas empieza… y el protagonista principal ya tiene nombre y apellido: Andrés Hurtado, el hombre que sería capaz de derrumbar medio Poder Judicial con tal de ver la luz fuera de la cárcel!
