Una gran perdida para la TV peruana

¡Una bomba devastadora ha sacudido el corazón de miles de peruanos!  Esta vez no se trata de una broma, ni de un sketch. Es oficial, irrevocable y tristemente definitivo: el entrañable personaje de “La Paisana Jacinta” no volverá jamás a la televisión peruana. Así como lo lees. La icónica mujer andina de vestido floreado, dientes prominentes y acento peculiar, que durante años arrancó carcajadas en los hogares del país, ha sido sentenciada al olvido… por orden judicial.

Mientras este último sábado, el popular “prosor Paulo Autuori” —una de las más hilarantes y queridas creaciones de Jorge Benavides— regresaba triunfante a las pantallas, la sombra de una ausencia estremecía a sus seguidores más fieles: ¿dónde está la Paisana? ¿Por qué no vuelve con su sombrero, sus ocurrencias y esa picardía que hizo historia?

La respuesta es lapidaria: La Corte Superior de Justicia de Cusco la prohibió para siempre.

Desde 2019, esta resolución judicial considerada “histórica” por algunos sectores, y “censura disfrazada” por otros, prohibió terminantemente la difusión y personificación de la Paisana Jacinta en cualquier medio de comunicación, incluyendo TV, internet, redes sociales, e incluso presentaciones en vivo como circos. ¿La razón? La consideraron una representación racista y humillante de la mujer andina. El fallo no solo se hizo cumplir con rigor, sino que ha resistido todo intento de apelación.

Jorge Benavides, el maestro de la comedia popular peruana, no se quedó de brazos cruzados. En marzo del 2024, el mismo JB expresó en redes su frustración al saber que el caso había llegado hasta el Tribunal Constitucional, rogando porque “la sabiduría de los magistrados” lo liberara de lo que llamó cadenas a su libertad artística. Alegó que jamás fue debidamente notificado físicamente de la sentencia, sino solo por medios digitales, lo que le impidió presentar una defensa adecuada.

Con ese argumento, presentó un recurso de amparo en 2020, exigiendo que se retrotraiga el proceso y se le permita iniciar un juicio para anular el fallo. Sin embargo, el sueño se convirtió en pesadilla: el amparo fue archivado en dos instancias por tecnicismos, y el Tribunal Constitucional, en enero de 2025, confirmó que su caso no cumplía los requisitos para ser admitido.

📉 La lucha legal ha sido larga, dura… y perdida. A la fecha, no existe ninguna vía legal vigente que permita el regreso de Jacinta. Y lo peor: el fallo se mantiene hasta el fin de los tiempos.

Miguel Ángel Soria, abogado de JB, rompió el silencio y fue tajante: “Se le ha negado el acceso a la justicia por un formalismo irrelevante. ¡Por no tener una casilla judicial!” denunció indignado. El defensor afirma que, mientras Jorge Benavides tiene prohibido interpretar al personaje que él mismo creó, otros lo imitan libremente en redes sociales sin repercusiones legales. ¡Una paradoja absurda que clama por justicia!

La defensa no se rinde. Anunciaron que evalúan nuevas estrategias legales para devolverle la voz a uno de los personajes más reconocidos de la televisión peruana. Además, han solicitado al Tribunal Constitucional que reevalúe su decisión y anule el archivo del caso, pero hasta ahora no hay respuesta. La Paisana sigue en silencio. Y el Perú, también.

¿Por qué fue cancelada Jacinta? La Corte de Cusco fue clara: consideró que el personaje violaba derechos fundamentales de la mujer andina como su dignidad, identidad étnica, honor, igualdad y no discriminación. La sentencia ordenó no solo que el personaje desaparezca de todos los medios, sino también que se notifique a plataformas como Facebook, YouTube, TikTok e Instagram para que bloqueen toda difusión del contenido relacionado.

Una decisión drástica. Una pérdida para la cultura popular. Aunque para algunos fue ofensiva, para millones fue parte de su infancia, un ícono del humor nacional.

Hoy, con el regreso de otros personajes de JB, la tristeza de saber que Jacinta jamás volverá deja un vacío difícil de llenar.

¡Hasta siempre, Paisana! Nunca te olvidaremos.
Tu risa aún resuena… aunque la justicia haya decretado tu silencio.